1896 Díaz vuelve a reelegirse. Durante sus gobiernos se construyeron 20,000 km. de vías férreas; la red telegráfica comunicó completamente al país; llegaron a México grandes inversiones extranjeras y la industria nacional creció.
En materia económica, el gobierno de Díaz sufrió algunas crisis y devaluaciones, sin embargo, Limantour, su ministro de finanzas aplicó severas medidas para contar, al terminar el año fiscal de 1895, con un superávit en el presupuesto.
En cuanto a la educación, el gobierno de Porfirio destinó a la educación superior mucho dinero, se creó la Secretaría de Instrucción Pública (luego Secretaría de Educación Pública), bajo la dirección de don Justo Sierra, se reorganizó la Universidad Nacional, y dejando casi sin apoyo la educación popular por lo que una gran parte de la población era analfabeta.

Se realizaron muchas obras, en la Ciudad de México se construyó el canal de desagüe, el Hospital General, el Teatro Nacional, el Palacio de Correos y el de Telégrafos, el Palacio Legislativo, se apoyó la electrificación del país y se construyó la Presa Encasa que en esa época era la más grande en el mundo